12.3.12

aprendo

Vas a tener muchos nombres y rostros diferentes.
Te voy a llamar amigo, hermano, amor.
Te voy a buscar en multitudes enormes o a la vuelta de mi casa. 
Y no me alarma porque sé que siempre te voy a encontrar, brillantes tus ojos y tu sonrisa haciendo de guía a mi alma aturdida. 
Y se que siempre te voy a amar, para todas las vidas. Porque aunque la eternidad no existe, nosotros jugamos con ella.

11.2.12

Carta abierta

Ya no puedo pensar por dos.
Entonces voy a tener que empezar a creer todo lo que dicen de vos.
Las opciones son pocas, después de tantos años ya no tengo fuerza, nada me ayuda a evadir todas las señales de alarma y aquellas seguridades oscuras que me rodean. Y si por tanto tiempo luché para seguir viendo luz en vos fue porque realmente me supe vencedora, dueña de la verdad... dueña de una verdad que jamás fue mia.

Ahora estoy en esta nueva posición. Acorralada y con un nuevo camino frente a mis ojos que no quieren ver. Mis ojos que inventan un paisaje nuevo. Mis ojos que se quieren quedar atrás, lejos, con vos.

La locura fue siempre una respuesta. Tuya, mía. Cuando nadie entendía mis perdones, cuando nadie entendía mis eterna defensa ciega, cuando nadie entendía cómo se puede crear un amor de la nada. Cómo se puede amar desde el abismo y la basura barata. Ahí estaba  la locura para dar respuesta fácil a todo aquello que nunca supe explicar. Siempre hubo una palabra escrita para ayudarme a evadir las verdaderas razones de mi amor. En este momento ya no las busco. Alguien tiene en este mundo verdaderas razones para el amor? Por qué el mio deberia ser menos real a mis ojos si así lo senti yo? Si lo viví, lloré  y respiré durante tantos años?


Una vez me prometiste que YO nunca te iba a olvidar, y te di la razón. Pero hoy me doy cuenta que es muy larga la lista de desconocimientos que reina en tu vida, sabías que "nunca" y "para siempre" son dos grandes ficciones? Sabías que nadie tiene comprado un segundo? Que morimos y renacemos en cada uno de ellos? Cuando me doy cuenta de TODO lo que NO sabés me pregunto si tanto tiempo de sufrimiento de mi parte es solamente un capricho tuyo por no dejarte amar en paz. Me pregunto si realidad... Me pregunto si vos... si yo... Será que simplemente no entendés NADA del amor? Puede ser que sepas aún menos que yo?
Hoy tengo que dejar de cuestionar a la vida para poder empezar a vivirla. Agoté todas las opciones. Y creeme, aunque poco te importe, que intenté seguir quériendote. Intenté volver a lamerme las heridas sola, pero ya no puedo más. Necesito crear espacio en mi corazón para que llegue alguien más. Alguien que me de un poco de su fe. Alguien que ponga paños frios en este cuerpo quemado. Esta piel que viene de una guerra de cien años y ya no soporta ni una batalla más. Al menos no una sin sentido. Al menos no una sin frente y sin enemigo.


A mi manera, te cuidé. A mi manera, protegí tu nombre del presente que vos creaste para él. Miré profundamente. Tuve fe en el niño que eras. Tuve fe en el hombre que imaginé para vos. "El hombre que imaginé para vos", esa frase va a ensordecer mi mente por un tiempo. Creo que "El hombre que imaginé para vos" no distaba mucho del que veían todos. La única diferencia fue que años después el mundo lo daba por muerto y yo aún seguía confiando, esperando. Y aún lo espero. Me gustaría cruzarme con él alguna tarde inesperada. El problema, o la solución, es que si pretendo que ese hombre se cruce con "La mujer que imaginé para mi" es muy necesario que se terminen mis palabras, mis pensamientos, mi energía y mi amor a la distancia. Los mensajes cada lustro y las miradas cómplices cada tres años.


Sé que a tu manera me cuidaste. Durante años me cuidaste de vos. Juntos hicimos el esfuerzo. Ahora recuerdo momentos en los que fui apreciada. Como una muñeca de cristal. Me mirabas de lejos, conteniéndote para no romperme. Nunca me amaste y sin embargo tuviste la decencia de cuidarme a veces. Pero mientras tu alma se borraba se borraron también las barreras de lo correcto e incorrecto. Entonces bajé mis barreras también, te dejé entrar, y tal como lo habías vaticinado hace años... me destruíste sin pensarlo. Y en esa destrucción estamos mi elección y yo. Mi capricho y yo. Mi amor y yo.


Si alguna vez pensé "nadie nunca te va a querer como yo" fue simplemente porque me faltaban muchos días que vivir. Hoy creo que seguramente te habrán amado más y mejor. Y espero que vuelvas a encontrar eso en los días por venir.
Si alguna vez sentí bronca fue simplemente porque, aunque suene ilógico, creí que era un sentimiento que podia ayudarme.
Si alguna vez te perseguí, incomodé o fui un estorbo para tus objetivos personales, te pido disculpas, era una niña con demasiado amor y demasiada pasión en un cuerpo muy chiquito. Sí, intento justificarme aunque odie las excusas. Pero mi despedida tiene que ser coherente con todo lo anterior verdad? Siempre diste vuelta mis odios y encendiste mis pasiones más bajas.


No se decirte adiós porque siempre estás, en un rincón de mi mente o a la vuelta de la esquina. De manera cósmica e inexplicable o parado  frente a mi sonriendo sin sentido.  Te pido, aunque me duele, que ya NO ESTÉS. Sinceramente no sé que voy a hacer con todo este vacío que se arma cuando te tengo lejos del todo. Pero algo se me va a ocurrir. Siempre tengo una solución a mano, lo sabés bien.
En algún momento voy a dejar de llorar, pero me tenés que permitir hacerlo. Yo ya lo hice.

12.1.12

Últimamente no entiendo bien mi sufrimiento.
Si realmente sos como ellos dicen, y no lo que siempre pude ver.
Si realmente esa luz que veo en tus ojos nunca existió.
Por qué duele tanto la posibilidad de un silencio infinito?
Por qué me cuesta tanto dejar de recordar tu sonrisa?
Por qué iba yo a elegir amar lo oscuro?

22.12.11

Ser.

Quiero ser los ojos que mires cuando te de miedo ver hacia adelante.
 ser tus alas cuando te canses de volar.
 ser tus defectos y tu paz.
 ser tu sed y tu saciedad.
 caminar de la mano sin tocarte y no llegar a ningún lado, para poder estar en todos.

10.8.11

Saber por qué aún

Saber por qué aún doy cada paso esperando que me mires,
por qué todavía tiendo mis manos con la ilusión de atrapar las tuyas.
Entender de que manera consciente o  no, respiro tu aire y me alimento con pedazos de vida que robé del pasado.

Impulso, acción, emociones baratas.
Castillos de papel.
Comodidad.
Obsesión.
Todos tienen una buena respuesta para dar,
ninguna me completa, ninguna me sana.

14.12.10

Siempre vuelvo a vos, como si el límite del dolor fuese tu nombre.
Como si algo o alguien irremediablemente me obligara  a comparar cada pena, cada lágrima con las antes derramadas.
Como si nada fuese lo suficientemente malo, lo suficientemente gris al compararse.
El límite, la sangre, el oscuro, lo irremediable... todo tiene tus ojos. Tu mirada, tu aliento.
Nada es tan imperfecto. Nada tan mortífero. Nada vale un sollozo cuando llega tu recuerdo.
Y de nuevo, me encuentro parada en medio de la vida. Preguntándome si está bien o está mal. Si debería... si podría... si quisieras.
Pero me siento liviana entre todo esto, me siento libre entre los lamentos.
 Hasta llegué a la conclusión, tu dolor me es familiar. Cercano, cotidiano.
Entonces elijo y vuelvo a elegir. La comparación. El desatino. El creerte superior a cualquier otra cosa.
Nada se salvaguarda de tu recuerdo.
Nada termina por si mismo.
Nadie es.
Nadie sigue.
Me protejo y me libero en tu dolor.
Comparo y reacciono solo por vos.
Y vivo, como si ayer fuese todavía y mañana una ficción deseadamente inalcanzable.

9.11.10

(veinticuatro)

Una puerta.
Prender y apagar las luces.
Escuchar el sonido del interruptor.
Tirar la cadena.
Caminar. Cerrar la puerta.
Abrir canillas. Cerrarlas.
Servir un vaso de agua. Tomarlo. O no.
Pasos.
Ascensores.
Personas.
Sonrisas.
Saludos.
Más picaportes.
Más puertas.
Llaves que giran.
Interruptores.
Luces.
Teléfonos.
Personas.
Personas.
Personas.
Trajes negros. Camisas blancas.
Tacos. Pasos.
El Vacío.
Un cielo azul.
Un día.
Mil sonidos.
Entonces, al fin, la noche.
Y en silencio, agradecer
una vez más habían pasado por alto que su corazón ya nunca latía.

27.8.10

No entiendo tu empeño

(des-controlado
irreverente
des-prolijo
des-almado
des-ubicado)

por entrar a escena
a desarmar mi vida
cada vez que decido mover las piezas a mi favor.

21.8.10

Quiero

Que sepas todo sin que yo te lo diga.
Que tus ojos brillen tanto como los míos.
Que salgan mariposas de mi boca y viajen a bailar en tu estómago. 
Hacerte sonreír y reír.
Regalarte perfectos días soleados.
Cocinarte la mejor torta de vainilla del mundo.
Escribir la canción más dulce de todas, solo para vos. 
Acariciar los hoyuelos de tu sonrisa.
Inventar el  barrilete más grande que hayas visto.
Mimarte. Besarte. Quererte. 
Quererte. Quererte. Quererte. 
y quererte m á s. 

12.8.10

Que nunca había sentido algo así.
Que todo parecia irreal
Que nunca antes
Que nunca de esta forma
Que...
¿Qué podría decir que estirara mi existencia dos segundos más en tu futuro?


30.7.10

desordeno
ordeno
desordeno
ordeno
no te encuentro
no estás
no te caíste debajo de la cama
no me estás esperando en el comedor
no estás
desordeno
ordeno
en la rendija de la puerta
en la mesita del televisor
entre las medias sucias
no estás
con la vajilla importada de china (town)
con las hojas gastadas de mis libros
con el pasaje viejo de subte que nunca usamos
no estás
en la basura
no estás
en el agua de los floreros
no estás
en las botellas de cerveza vacías
no estás
desordeno
ordeno
no te encuentro

27.7.10

.

Sentarte a escribir no es nada parecido a sentarte a hacer nada.
Sentarte a escribir es confrontar todas esas cosas que querés hacer callar gritando.
Sentarte a escribir se parece bastante a ir al baño y ponerte a observar de manera detallada los resultados…
Sentarte a escribir es vaciar lo peor de vos y disfrutarlo, anhelando que otro par de ojos también así lo sienta. 
Estoy sentada, hay un teclado en frente mío y un stock de animales encerrados en mi alma.
Bastarán mil palabras para calmar mi corazón? 

21.7.10

. quierodecirte

3.7.10

Sábado a la mañana.

Sábado a la mañana. El momento más esperado de los últimos meses.
 Aquello tan deseado, planificado, soñado mil veces de panza al cielo... al fin había llegado. 
Quería cumplir una  las tantas cábalas que su madre le había enseñado, por eso decidió bajarse de la cama con el pié derecho, para después y  prestando atención en actuar como una mujer completamente decidida (si empezaba dudando temía no poder lograr ninguno de los pasos siguientes) fue caminando derechito para el baño. 
Se lavó los dientes. Tonalizó aún más rozadas sus mejillas regordetas. Peinó su largo pelo color miel en el sol para que se contagie con un poco de luz. Se puso el vestido rosa con florcitas blancas. Y sin pensarlo dos veces emprendió camino intentando hacerlo lo más pausadamente posible.
Después de respirar profundo tres veces mirando la puerta cerrada delante de su nariz, finalmente hizo el golpe, decidido pero suave e insistente pero cordial, que tanto había planeado en soledad. 
Miles de pensamientos inconexos peleaban en su cabeza. 
Nervios, transpiración, ¡el pelo! ¿que estaría pasando con su pelo?
Se quedó sin aire, detrás del umbral ella la miraba con ternura. 
-¡Hola! - le dijo con la segunda sonrisa más ancha que vió en toda su vida. 
- Hola, Señora. Está Facu?  Vine a pedirle la tarea... 

2.7.10

>>

Inevitablemente los recorridos en flashback me llevan hasta vos. 
Entonces todos esos hilos que me tan pacientemente me dediqué a cortar se renuevan inmortales presionando mi corazón y conduciéndome de nuevo a la nada. 
Mis manos tiemblan, mi corazón se estruja, y mi mente pasea reconociendo cada síntoma... cada rincón de tu cuerpo en el que lentamente el veneno de tu existencia se posó. 
Reconozco cada segundo, cada fase, cada momento repetido a través del tiempo y de mi ser. 
Y entonces empiezo a correr.
Hacia adelante, lejos tuyo. 
Hacia todos esos momentos que no tocaste. 
Corro directo a este sol que hoy brilla para mí. 
Corro directo a los besos que no me diste y que otro regaló pacientemente a mi boca.
Corro hacia lo nuevo
Dejo que el viento me despeine.
Vivo 
respiro
siento
renuevo.
Y es entonces es cuando puedo sentirlo,
ya no hay más flashbacks para mi. 

18.6.10

Colaboración. Autor: Daniel Rodriguez.

Deje que todo sucediera
Deje que todo sucediera
para darle una oportunidad al destino
para darte una oportunidad a vos
Deje que todo sucediera
para poder creer
para poder soñar
Deje que todo sucediera
para poder ver
para poder gritar
Deje que todo sucediera
para poderte ver
para poderte abrazar
Y así dejemos que todo suceda
para poder vivir
para poder estar


Un lugar
necesito viajar a un lugar
donde no tenga un pasado
solo un presente y un futuro
donde las olas del mar
despeinen mis pensamientos
y la espuma deshaga mis recuerdos
Necesito un lugar en el cual
compartir junto a alguien 
el transcurso del resto de mi vida
Un lugar para crecer
crear y compartir
un lugar al cual llamar mio
al cual llamar nuestro



10.6.10

Final.mente

Finalmente, hoy soy mucho más que el impulso que me llevó hacia vos.
Creo que podría separar claramente el segundo en donde al respirar tu aire respiro también la perdida de dominio sobre mi. 
Creo, que podría tenerte parado en frente y no caer
Puedo sentir la diferencia. 
Hoy solamente te amo. 
Y eso me basta para poder caminar sin sostenerme de tu ausencia. 
Y me basta también para respirar, sin que todo el aire que llene mis pulmones sean solo exhalaciones tuyas.  
Y eso alcanza
al menos me alcanza a mi, para seguir.

7.6.10

"...y si querés una imagen mental, el asunto es parecido a que te pares frente a mi y me estrujes el corazón con una mano."

Sentada de frente al sol, lanzo preguntas al viento


Que calle estarás cruzando?
Cual será la canción que no podés dejar de escuchar?
Que brazos tibios te rodearán hasta dejarte dormido?
Como será el cielo que te rodea?
Cuando y porqué se nublarán tus ojos? 
Que te hace falta y que te sobra?
Quien te desvela y quien te enferma? 


Pregunto con inocencia y dejo en mi corazón la más urgente, la más temida.
Aquella de respuesta peligrosamente sutil... 


 ... a cuantos pasos estás de mi? 
 

28.5.10

esto es cierto.

Mi pequeña cama, vos y yo. 
Giré lentamente la cabeza, repitiéndome esto es cierto. 
Mi escaso entendimiento jugaba una carrera contra el pulso acelerado. 
Esperaba que te canses, rezaba creyendo que en algún momento irremediablemente debería abrir los ojos. 
Perdí tiempo debatiendo en contra de la realidad.
A veces simplemente la vida nos entrega fugazmente nuestro deseo más sagrado.
Me costaba acostumbrarme a la idea de que tanta felicidad cupiera en mi cuerpo sin hacerlo explotar. 
Se me escurrió el tiempo en las manos.
Mi pequeña cama, vos y yo.
Uno, dos, tres, mil segundos. 
Giré lentamente la cabeza, buscando comprobar...
pero ya no había tiempo para creer o no creer.